The Physiology of Bone Pain. How Much Do We Really Know?
Fuente
Este artículo es originalmente publicado en:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/27199772
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4844598/
http://journal.frontiersin.org/article/10.3389/fphys.2016.00157/full
De:
Nencini S1, Ivanusic JJ1.
Front Physiol. 2016 Apr 26;7:157. doi: 10.3389/fphys.2016.00157. eCollection 2016.
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Abstract
Pain is associated with most bony pathologies. Clinical and experimental observations suggest that bone pain can be derived from noxious stimulation of the periosteum or bone marrow. Sensory neurons are known to innervate the periosteum and marrow cavity, and most of these have a morphology and molecular phenotype consistent with a role in nociception. However, little is known about the physiology of these neurons, and therefore information about mechanisms that generate and maintain bone pain is lacking. The periosteum has received greater attention relative to the bone marrow, reflecting the easier access of the periosteum for experimental assessment. With the electrophysiological preparations used, investigators have been able to record from single periosteal units in isolation, and there is a lot of information available about how they respond to different stimuli, including those that are noxious. In contrast, preparations used to study sensory neurons that innervate the bone marrow have been limited to recording multi-unit activity in whole nerves, and whilst they clearly report responses to noxious stimulation, it is not possible to define responses for single sensory neurons that innervate the bone marrow. There is only limited evidence that peripheral sensory neurons that innervate bone can be sensitized or that they can be activated by multiple stimulus types, and at present this only exists in part for periosteal units. In the central nervous system, it is clear that spinal dorsal horn neurons can be activated by noxious stimuli applied to bone. Some can be sensitized under pathological conditions and may contribute in part to secondary or referred pain associated with bony pathology. Activity related to stimulation of sensory nerves that innervate bone has also been reported in neurons of the spinoparabrachial pathway and the somatosensory cortices, both known for roles in coding information about pain. Whilst these provide some clues as to the way information about bone pain is centrally coded, they need to be expanded to further our understanding of other central territories involved. There is a lot more to learn about the physiology of peripheral sensory neurons that innervate bone and their central projections.
Resumen
El dolor está asociado con la mayoría de las patologías óseas. Las observaciones clínicas y experimentales sugieren que el dolor óseo puede derivarse de una estimulación nociva del periostio o de la médula ósea. Se sabe que las neuronas sensoriales inervan el periostio y la cavidad medular, y la mayoría de ellas tienen una morfología y un fenotipo molecular coherente con un papel en la nocicepción. Sin embargo, poco se sabe sobre la fisiología de estas neuronas, y por lo tanto la información sobre los mecanismos que generan y mantienen el dolor óseo carece. El periostio ha recibido mayor atención en relación con la médula ósea, lo que refleja el acceso más fácil del periostio para la evaluación experimental. Con las preparaciones electrofisiológicas utilizadas, los investigadores han sido capaces de registrar desde unidades periosteales aisladas en aislamiento, y hay mucha información disponible sobre cómo responden a diferentes estímulos, incluyendo aquellos que son nocivos. Por el contrario, las preparaciones utilizadas para estudiar las neuronas sensoriales que inervan la médula ósea se han limitado a registrar la actividad de múltiples unidades en los nervios enteros y, aunque claramente reportan respuestas a la estimulación nociva, no es posible definir respuestas para las neuronas sensoriales individuales que inervan La médula ósea. Sólo hay pruebas limitadas de que las neuronas sensoriales periféricas que inervan el hueso pueden ser sensibilizadas o que pueden ser activadas por múltiples tipos de estímulos, y en la actualidad sólo existe en parte para las unidades periosteales. En el sistema nervioso central, está claro que las neuronas del cuerno dorsal espinal pueden ser activadas por estímulos nocivos aplicados al hueso. Algunos pueden ser sensibilizados en condiciones patológicas y pueden contribuir en parte a dolor secundario o referido asociado con la patología ósea. La actividad relacionada con la estimulación de los nervios sensoriales que inervan el hueso también se ha informado en las neuronas de la vía espino-parabraquial y cortices somatosensorial, ambos conocidos por los papeles en la codificación de información sobre el dolor. Si bien estos proporcionan algunas pistas sobre la forma en que la información sobre el dolor óseo es codificado centralmente, necesitan ser ampliadas para ampliar nuestra comprensión de otros territorios centrales involucrados. Hay mucho más que aprender sobre la fisiología de las neuronas sensoriales periféricas que inervan el hueso y sus proyecciones centrales.
KEYWORDS:
bone; bone marrow; bone pain; electrophysiology; nociception; pain; periosteum
- PMID: 27199772 PMCID: PMC4844598DOI: 10.3389/fphys.2016.00157
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